Antes de saber qué es el offshore, es importante identificar el origen del nombre, offshore es una palabra de origen inglés, que en traducción literal significa «fuera de la costa» o «en otro territorio».
Offshore es un término utilizado para referirse a las sociedades o empresas situadas en un territorio diferente al de los propietarios. Esto suele ocurrir cuando los propietarios de empresas desean escapar de una elevada carga fiscal.
Qué es el offshore y cómo funciona
La mayoría de los grandes cambios en el mundo contemporáneo no fueron realizados por agentes políticos, sino por empresarios, fueron los empresarios los que hicieron los smartphones y muchas otras innovaciones tecnológicas.
Algunos países, con la intención de reducir la desigualdad social, deciden aumentar los impuestos del país, lo que acaba ahuyentando a algunos empresarios, que no quieren pagar más impuestos.
Una sociedad offshore se diferencia de una empresa multinacional ya que, por lo general, no necesitan tener su sede o actividad económica en el país en el que se abren o en el país de origen del empresario, por lo que este tipo de sociedad puede denominarse sociedad extraterritorial.
¿Es ilegal el Offshore? ¿Qué beneficios?
Una sociedad offshore no es ilegal, aunque pueda parecerlo debido a algunos acontecimientos recientes, como los papeles de Panamá, que culminaron en la película El Lavadero.
Esta modalidad de negocio suele ubicarse en países considerados paraísos fiscales, que también son utilizados por los delincuentes para realizar el blanqueo de capitales y ocultar activos ilícitos.
A pesar de las suspicacias que rodean a esta modalidad, la apertura y utilización de una sociedad offshore es totalmente legal.
De hecho, es una herramienta que puede utilizarse para el bien o para el mal, al igual que el dinero en efectivo, que también puede utilizarse para el blanqueo de dinero.
Los principales beneficios que la gente busca, cuando busca offshore’s son la privacidad, la seguridad en cuanto a sus activos y la reducción de los pagos de impuestos.
¿Cuál es la diferencia entre offshore y onshore?
Suena un poco raro, pero además de los offshores, también hay onshores.
Las empresas onshore tienen obligaciones fiscales más estrictas y también tienen un sector financiero bien desarrollado, es casi una multinacional.
Mientras que las offshores gozan de mayor privacidad, ventajas fiscales e incluso exención de auditorías y de algunas obligaciones fiscales, dependiendo de la categoría, algunas incluso permiten que sus miembros sean anónimos.
Qué tipos de offshore
Muchas familias de altos ingresos tienen el hábito de abrir participaciones personales y familiares en paraísos fiscales, para gestionar las inversiones internacionales y tener más privacidad. Hay varias formas de dividir los offshores y los dividendos, algunas de ellas:
LLC – SOCIEDAD DE RESPONSABILIDAD LIMITADA
Este régimen fiscal es un tipo de sociedad americana, de responsabilidad limitada, que no requiere visado ni residencia en el país para su constitución.
La SRL está formada por uno o más socios, y no es necesario que los socios estén presentes en el país. Los socios de esta categoría de empresa no tienen responsabilidad personal en cuanto a las obligaciones.
La gestión puede ser llevada a cabo por uno de los miembros o socios, o puede ser asignada a algún ejecutivo externo.
COMPAÑÍA INTERNACIONAL DE NEGOCIOS (IBC)
Este negocio es una organización que puede ejercer cualquier actividad comercial principal en el país en el que se ha creado.
El empleador debe estar centrado en los negocios internacionales, no tiene derechos severos para la presentación de los contenidos y no es tributario, por lo que también es el tipo más utilizado entre todas las offshores.
CONFÍA EN
Este tipo de sociedad es una opción que algunas personas eligen para proteger sus activos. La diferencia más clara con respecto a las demás es que la ubicación de esta empresa debe ser extraterritorial.
La palabra fideicomiso conlleva en su significado, la custodia y gestión de los bienes, intereses y propiedades de terceros. Se crea mediante la transferencia de una cantidad en bienes, que debe realizar el fideicomitente (persona interesada), a otra persona llamada fiduciario (responsable de la administración).
El fiduciario se encarga de llevar a cabo la gestión de estos bienes, según las directrices del fideicomitente, y esta gestión puede cerrarse y transferirse posteriormente al propio fideicomitente o a un beneficiario elegido.
El fideicomitente puede definir el nivel de independencia que puede tener el fideicomisario en la gestión de los activos, que puede ser limitado, y denominarse fideicomiso fijo, o tener una mayor independencia, y denominarse fideicomiso discrecional.
En la segunda alternativa, el coste es mucho mayor, ya que se trata de una categoría que requiere un nivel de confianza muy alto en el fiduciario, que debe ser contratado únicamente en el país donde se va a constituir la sociedad.
Muchos países suelen aumentar la presión fiscal para recaudar más impuestos y lograr la justicia social, pero muchos millonarios y multimillonarios no quieren pagar estos impuestos.
Toda esta situación genera una huida hacia estos países, considerados como paraísos fiscales, generando una economía fiscal muy grande.
Otras personas, además de evitar los altos impuestos, también quieren proteger sus activos, ya que algunos países no tienen una seguridad jurídica muy alta, lo que hace que sus activos sean muy vulnerables. Por esta y otras razones, es muy importante saber qué es el offshore y entender cómo funciona.
Independientemente del objetivo, antes de todo este proceso, se debe realizar una buena planificación fiscal con un contable o especialista para comprobar la viabilidad de esta estrategia y, si es factible, continuar con un seguimiento profesional adecuado.
Disfrute y descubra también cómo abrir una empresa en Estados Unidos.
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